El camino más corto

 

Santa Margarita dice a menudo en sus escritos que el conocimiento del Corazón de Jesús es el camino más corto para ir a El. Y que es el mismo Jesús quien desea que se propague este conocimiento.

 

“Me parece que no hay camino más corto para llegar a la perfección, ni medio más seguro de salvación que consagrarse totalmente a este divino Corazón”.

 

“Que todo vuestro deseo sea amar, honrar y glorificar a este divino Corazón… Para ello, no ahorréis ni trabajos ni penas pues es el medio más eficaz para entrar en su amistad y atraer sobre vosotros la abundancia de sus gracias y el reinado de su ardiente caridad”.

 

Y también esta carta al P. Croiset:

 

“Los tesoros de bendiciones y gracias que encierra este Sagrado Corazón son infinitos; no sé que haya en la vida espiritual ningún otro ejercicio de devoción más propio para elevar en poco tiempo a un alma a la más alta perfección, y para hacerle gustar las verdaderas dulzuras que se encuentran en el servicio de Jesucristo. Sí, lo digo convencida, si se supiera lo que agrada a Jesucristo esta devoción, no habría un cristiano que no la practicara, por poco amor que tuviera a este amable Salvador”.

 

En otra carta de 1689:

 

“El Sagrado Corazón tiene un deseo vehemente de ser conocido, amado y honrado de los hombres.

Ha hecho conocer que este deseo es tan grande que promete que todos los que se consagren y entreguen a Él, para darle el placer de rendirle y procurarle todo el amor, honra y gloria que estén a su alcance, según los medios que Él les dé, no se perderán jamás y que Él mismo será su asilo seguro en todas las emboscadas de sus enemigos; pero sobre todo a la hora de la muerte, este divino Corazón les recibirá con amor, asegurándoles su salvación, y tendrá cuidado de santificarles y hacerles grandes ante su Padre eterno, tanto como ellos se hayan preocupado de extender el reinado de su amor en los corazones”.