La llamada del Corazón de Cristo es universal
A nosotros nos toca responder a la llamada. “Las gracias, añade Margarita María, no faltarán. Él espera de nosotros una fiel correspondencia en retorno a su gran amor”.
Nuestra alegría, nuestra vida, nuestra santidad están en Él. ¿Lo comprendemos? ¿Lo creemos?